viernes, 16 de marzo de 2012



Las personas tenemos profunda necesidad de amor, pero no nos importa si no damos lo mismo o lo justo. Somos sociales pero intolerantes. Queremos ser comprendidos pero no comprendemos. Deseamos que otros construyan y destruimos. Sólo lograremos hacer de este mundo algo distinto cuando acabemos con el egoísmo y empecemos a servir, componer, edificar, proveer... Cuando respondemos al llamado intrínseco, que Dios sembró en lo más profundo de nuestro ser, de amar...

No hay comentarios:

Publicar un comentario